Eva, volontaire à distance de l’association “Mano a Mano” – Eva, voluntaria de la asociación Mano a Mano a distancia
El pasado 3 de abril tuve que dejar la asociación Mano a Mano Perú, en la cual trabajaba y vivía desde el mes de julio del 2019. Como consecuencia de la crisis sanitaria, l@s voluntari@s de Mano a Mano fuimos repatriados a Francia con la ayuda de France Volontaires Perú. La transición fue bastante brutal. Sin embargo, pude seguir mi Servicio Cívico en teletrabajo desde Francia.
Seguir su misión a distancia
Al principio, no resultó fácil seguir trabajando sola y estando tan lejos. En Mano a Mano estuve acostumbrada a trabajar en equipo, reuniéndonos varias veces al día. Pero tuve la suerte de estar acompañada por la directora de la asociación, Sylvie Dumans, que me ayudó mucho y que me avisaba todos los días por teléfono de cómo iban las cosas en La Ensenada, el asentamiento humano donde trabaja Mano a Mano. Pasantes y antigu@s voluntari@s volvimos a trabajar en equipo, como nos habíamos acostumbrado en Perú, y además fortaleciendo el lazo intergeneracional gracias a la coordinación con los miembros de Mano a Mano France.
Una asociación siempre activa por la comunidad
Frente a la crisis sanitaria, las necesidades de productos de higiene y de víveres son tales que la asociación armó un proyecto de emergencia en el cual se involucró toda la comunidad. Desde Francia, apoyamos buscando financiamientos, organizándonos mediante reuniones virtuales.
También se hizo un trabajo de información a la comunidad con el objetivo de prevenir el contagio de la enfermedad, las violencias domésticas, y seguir apoyando la educación de los niños, niñas y adolescentes. En este sentido se elaboraron textos informativos que se transmitieron a los dirigentes de la comunidad para ser difundidos por altoparlante.
Hoy, como muchas asociaciones, Mano a Mano Perú está tan impactada por la crisis sanitaria que podría llegar a desaparecer después de más de 27 años de existencia. Tod@s nos movilizamos para que esto no pase. Como nos lo enseñaron l@s Peruan@s siempre: ¡SÍ SE PUEDE!
Eva